La agricultura urbana no es sólo se puede llevar a cabo
comunitariamente si no también individualmente en casa, cultivando en el
terraza, balcón, patio o en el mejor de los casos en jardines privados.
Es un fenómeno creciente, cada vez hay más personas que
cultivan sus propias verduras en casa. Sin ir más lejos en el corto trayecto entre
mi residencia y mi lugar de trabajo, mirando las plantas de balcones cada vez
encuentro más plantas hortícolas (berenjenas, pimientos y tomates) que
sustituyen a las tradicionales plantas ornamentales.
Cada vez es más fácil acceder a material (mesas de
cultivo, sustratos, abanos, productos fitosanitarios, semillas, planteles,
herramientas, etc) e información de cómo cultivar frutas y verduras, ya sean
libros especializados, blogs de internet o cursos que se organizan para
explicar técnicas de hortifruticultura urbana.
Algunos obtentores de plantas hortícolas empiezan a
incluir en sus catálogos de productos semillas seleccionadas pensando en las
condiciones de cultivo en casa.
Creo que será una actividad en auge, ya sea por la crisis o por nuestra mayor conciencia sobre lo que comemos y su procedencia.